En el corazón del histórico Palais des Papes de Aviñón, Louis Vuitton presentó su colección Crucero 2026 como un acto teatral de alta costura. En diálogo con el espíritu del célebre festival de teatro de la ciudad, la Maison exploró el poder performativo del vestuario y su capacidad para emocionar, transformar y contar historias. Una pasarela que se convirtió en escenario, donde la moda, la arquitectura y el arte se fundieron en una celebración del estilo como acto expresivo.
Louis Vuitton se caracteriza por organizar desfiles en todo el mundo en lugares emblemáticos de renombre global y obras maestras arquitectónicas, rindiendo homenaje a la artesanía local. La Maison ha presentado sus colecciones, entre otros lugares, en la residencia Bob y Dolores Hope de John Lautner en Palm Springs; en el Museo de Arte Contemporáneo de Oscar Niemeyer en Niterói; en el Museo Miho de I.M. Pei cerca de Kioto, y en el Instituto Salk en California. El desfile de Louis Vuitton en la Semana de la Moda de París tuvo como escenario la estación de tren Gare du Nord, la más transitada de Europa con la participación destacada de la modelo argentina Mica Argañaraz
El viaje arquitectónico de Nicolas Ghesquière continúa en el Palais des Papes, representando un renovado énfasis en el patrimonio cultural y arquitectónico de Francia.
Este año, el centro histórico de Aviñón, que incluye el Palais des Papes, celebra el 30º aniversario de su inclusión en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. El desfile Crucero de Louis Vuitton busca rendir homenaje y reconocer la historia arquitectónica multifacética del Palacio, así como su papel evolutivo en el panorama cultural y social de Aviñón y Francia. Nicolas Ghesquière, Director Artístico de las Colecciones de Mujer, en colaboración con la artista Es Devlin, presenta un diseño escenográfico que aspira a guiar a los invitados a través del significado arquitectónico y cultural de uno de los monumentos más importantes de Francia. La pasarela, que comienza con una estructura lineal única instalada entre los palcos vacíos del teatro Cour d’Honneur, celebra el papel del Palais des Papes como monumento de la cultura moderna y contemporánea, sede de múltiples funciones de ópera y teatro cada año.
A medida que las modelos avanzan, la luz se introduce de manera cuidadosa y gradual para resaltar detalles y elementos arquitectónicos, utilizando cuidadosamente tanto la luz como las sombras para yuxtaponer la masa de la estructura con la elegancia de su decoración, un patrimonio arquitectónico único del Palais des Papes.
Al llegar las modelos a la pasarela principal en el escenario de la Cour d’Honneur, se revela un suelo luminoso que muestra un diseño escenográfico que respeta delicadamente el patrimonio del lugar. El uso de madera maciza y terciopelo rojo contrasta con el diseño futurista de una estructura de andamiaje rojo que flota ligeramente sobre el suelo lechoso.
Los invitados, sentados en sillas y bancos diseñados a medida, miran hacia el público vacío del teatro, una inversión deliberada que juega y altera los roles teatrales tradicionales. Esta reubicación sitúa a la audiencia en el escenario y obliga a reconocer la Cour d’Honneur como un espacio de patrimonio, cultura y representación.
Laboratorio cultural para todas las formas de expresión, la Cour d’Honneur inspiró a Louis Vuitton a reflexionar sobre el carisma de un vestuario y la imaginería que evoca. Ya sea para el día a día o para ocasiones excepcionales, la ropa tiene el poder —como todos sabemos por experiencia— de transformar el estado de ánimo, la apariencia y el carácter: de desempeñar un papel secundario esencial.
Fotografías Louis Vuitton
