Este proyecto se presenta como un ejercicio de planta libre, donde la interacción visual y espacial entre los diferentes ambientes es tan calculada como sutil, logrando un equilibrio entre el uso cotidiano y el de recepción formal. La espacialidad abierta se organiza sin recurrir a divisiones físicas, sino mediante el hábil uso de materiales, colores y texturas, convirtiéndose en un auténtico ejemplo de diseño consciente y refinado.
El recorrido inicia con un vestíbulo de acceso que marca el tono general de la vivienda. Aquí, el empapelado negro con motivos geométricos dorados en el techo destaca de manera dramática, proporcionando un primer punto focal de sofisticación que delimita la entrada de forma eficaz, generando una atmósfera de bienvenida elegante. Al avanzar, el comedor se define con un empapelado en tonos beige y negro, que contrasta armoniosamente con una mesa rectangular hecha a medida en dekton Entzo. Este material, escogido por su resistencia y versatilidad, refleja una sensibilidad hacia la funcionalidad cotidiana sin perder el acento estético. La combinación con sillas de roble y una luminaria suspendida en dorado aporta una calidez acogedora y refinada, un punto alto de este espacio.
El estar de los niños se organiza con un mobiliario en roble natural, diseñado para cumplir tanto una función lúdica como práctica. Un elemento innovador es su puerta corrediza ranurada, que permite ocultar una zona específica, garantizando una estética limpia y ordenada, sin perder la funcionalidad que requiere un espacio de uso frecuente. El cuarto de estar principal es una muestra de equilibrio y simetría, con sillones diseñados exclusivamente para el proyecto y mesas ratonas redondas en cuero y acabados laqueados, que añaden un juego de texturas y volúmenes que enriquecen la percepción del espacio. Este ambiente adopta influencias del estilo Mid Century Modern, pero con una frescura y elegancia contemporánea que le otorgan carácter y sofisticación. La presencia del bar, concebido como un ambiente único y definido, aporta una nota de glamour con su barra en mármol Marquina negro de vetas blancas, un material lujoso y distintivo que se funde con los muebles laqueados en negro, reafirmando el espíritu elegante del proyecto.
La alfombra persa, en tonos vibrantes, se convierte en una pieza protagonista al aportar un toque de color y personalidad, contrastando de manera deliciosa con el diseño global. Además, el uso meticuloso de la iluminación en diversas capas –luminarias de techo, luces LED en el mobiliario, y detalles decorativos en puntos estratégicos– permite crear una atmósfera envolvente que realza cada rincón del proyecto. La diferenciación de los suelos es otro detalle digno de mención: la elección de madera de roble en disposición a junta corrida en el estar de adultos, frente al patrón espigado en el resto de la planta, establece una separación visual sin sacrificar la continuidad espacial. Este recurso sutil pero efectivo permite definir el área de adultos como un espacio más íntimo dentro del esquema abierto, destacando también por su mobiliario a medida en roble y laqueado en greige, que integra un home office, almacenamiento y una estufa de leña en una composición tan funcional como estética.
La cocina sorprende con un «mood board» cálido y elegante, donde la barra en granito Alpinus en tonos naturales establece una interacción atractiva con cerámicas verticales en verde seco. La carpintería renovada en tono gris arcilla da continuidad al diseño, mientras que el porcelanato en color cemento en el pavimento añade una nota de contraste visual. En conjunto, el proyecto se presenta como una propuesta de alto nivel, donde cada detalle ha sido estudiado con una mirada profesional y estética, consolidando un espacio que logra ser tan funcional como exquisitamente diseñado.
Leticia Achard es Diseñadora de Interiores líder de Estudio 1601, graduada en la Universidad ORT Uruguay en el año 2003, completó sus estudios en la Escuela de Arte y Fotografía en Berkeley, California durante dos años y trabajó en Santiago de Chile en un reconocido estudio de Arquitectura hasta el año 2013 cuando regresó a Uruguay y decidió emprender y crear su propio estudio de Interiorismo. También estudió fotografía y diseño gráfico y ambas disciplinas influencian de gran manera parte de sus proyectos. Estudio 1601 es un estudio de Arquitectura y Diseño de Interiores se especializa en “Proyectos Llave en Mano”. Su objetivo además de lograr espacios únicos y originales es liberar al cliente de toda preocupación.
Fotografías Sebastián Aguilar