La poesía del Diseño, Hassen Balut en ex Hotel Oceanía

La intervención de Hassen Balut en un piso del nuevo edificio OCEANIA nos enseña un espíritu donde el confort alcanza un nivel distinto. La atmósfera lograda por el profesional es sugestiva y promueve magia y encantamiento. La planta, re definida por el diseñador, se vuelca hacia esa ensenada de poesía a la que los montevideanos denominan “la curva del ensueño”. La atmósfera es varonil, las paredes fueron revestidas con estuco veneciano, técnica centenaria que confiere una textura especial a las superficies. El color es claro, casi blanco y dialoga con el rubio desde los matices que proponen las piezas de roble de malasia que revisten el pavimento.

Piezas de mármol negro marquina fueron empleadas para generar las interfaces en la circulación. Aparecen integrando el comedor con la cocina, el hall de circulación con el baño social, en el dormitorio, los vestidores y el baño. Los enormes ventanales lucen cortinas en back out y otras con gruesos listones de madera que a modo de persianas aportan contención a la amplitud que ofrecen los espacios interiores. Las puertas se mimetizan con las paredes y en algunos casos, como la cocina o los dormitorios, están revestidas en gamuza color gris. Tiradores y herrajes en metal se presentan como detalles que acentúan el espíritu varonil de la escenografía propuesta por Balut. La iluminación cenital se apoya en luminarias belgas, especialmente importadas, con aperturas breves, con lo cual el carácter es dramático,

La intervención en una de las plantas del legendario edificio que originalmente contenía al Hotel Oceanía ofreció una fantástica oportunidad para que Balut desplegara su idea acerca de la resolución espacial del apartamento. Volcado hacia la costa del mar dulce, como lo denominara Solís al descubrirlo, el edificio ocupa uno de los predios con mejores vistas que ofrece la costa montevideana. El diseño de planta propuesto por Balut se apoyó en un dato significativo; doscientos cincuenta metros cuadrados de planta, a los que se suman otros cien de terrazas y enormes ventanales estableciendo un precioso perímetro. Las columnas circulares originales rescatan el espíritu art decó del edificio. Sobre ellos, Balut operó como un cirujano, generando una espacialidad rica que incluye paseos interiores con circulaciones inteligentes donde desplegó poesía. El trabajo de Balut comenzó con la obra de remodelación de la estructura. Aprovechando esa circunstancia generó una planta a medida que atiende la idea sobre la cual el diseñador concibió el espacio para su habitante.

Al momento de resolver el equipamiento, Hassen Balut desplegó la idea sobre las que se establecieron las necesidades culturales y espirituales del habitante. En base a ello, se diseñó y construyó cada pieza de mobiliario, recurriendo al mercado local solo para los complementos o aquellos muebles que era necesario para completar las distintas escenas. La marcada influencia estética que marca la obra de Hassen Balut lo vincula con el trabajo artesanal de los viejos muebleros europeos, los mismos a los que podemos identificar como precursores del interiorismo, antecesores de lo que hoy denominamos diseñadores de interiores. En la zaga que conforma la biblioteca de Balut, un personaje en particular cuenta con especial admiración, el francés Christian Liaigre. Los muebles diseñados para este apartamento se inspiran notoriamente en este creador, así como en Le Corbusier. Es el caso de las butacas y sofás que llamaron nuestra atención.

“Los muebles de asiento suelen establecer el concepto de la comodidad y el confort. Además de un ejercicio plástico, las butacas y sofás deben ser cómodos, atrapar al usuario y contenerlo con delicadeza, pero contenerlo…” afirma Balut. Llama la atención la presencia de obras de arte. Un personaje en madera de Joaquín Torres García, con una escala que no conocíamos, fotografías de Velazco y tallas en madera de Abdala. “…el personaje de Torres García integra un universo propio que he creado replicando al personaje del maestro. He fabricado 33 orientales y disfruto mucho al incorporarlos a mis trabajos. Luego la fotografía de Velazco es increíble, nos regresa el cartel original del viejo hotel que ocupaba al edificio. Es una toma increíble y además llega a medida de lo que nosotros buscamos al momento de concebir el espacio en este edificio. Con Abdala, sucede otro tanto. Y seguramente no es casualidad que trabaje con madera… El habitante es además un hombre de cultura plástica muy fina, hemos ubicado otras obras de arte con las cuales existe historia, vinculación, dialogo. Es importante asumir que los espacios humanos deben contener arte y libros.

Importa saber que la otra pasión de Hassen Balut es el cine. Al momento de volcarse plenamente al diseño abandonó una carrera en la que seguramente lo esperaba el éxito. No obstante ello, en su profesión la mirada del cineasta está presente. La encontramos en los planos cortos que logra con sus escenografías para vivir. Donde el diseño es poesía, la luz hace la diferencia y la armonía es plena. Hassen Balut fabrica atmósferas en las que vivir resulta inevitable.

Fotografías Hassen Balut

 

Ads

Lecturas recomendadas

33 mockup
Leer más
MOCKUP EL VIAJE
Leer más
Vikissimo-19
Leer más