El diseño nacional emergente puede definirse como sala de incubación, donde múltiples jóvenes talentos comprometidos apuestan a su visión innovadora y fresca. Comenzar siempre supone un desafío, traer nuevas ideas a un país de tradiciones arraigadas refleja valentía y ambición.
Para comprender los valores detrás de funlō es vital conocer a sus directoras: Marina Cardozo (27) , Licenciada en Diseño Industrial (Universidad ORT) y Flavia Calandria (34) Licenciada en Comunicación Visual (FADU / UDELAR). Ambas nos cuentan que tres años atrás se sorprendieron mutuamente, cuando descubrieron las infinitas similitudes en sus tableros de inspiración de Pinterest. Ambas imaginaron un mundo lleno de color, cuidadosamente curado con claras influencias de la tendencia “Dopamine Decor” (Decoración Dopamina) furor en la red social TikTok. Protagonizada por la mezcla de texturas, paletas de color vibrantes, estampados y mobiliario de autor (nuevo o vintage), esta tendencia honra la búsqueda del estilo personal, y toma por protagonistas a esa parte de la población que comienza a decorar su primer hogar haciéndolo propio: la juventud.
Las características que destacan a un producto funlō son la calidad y la originalidad. Cada paso dentro del proceso de diseño es cuidadosamente supervisado por Marina y Flavia, volviéndolo sumamente personal. Es importante destacar que el total de dicho proceso es realizado en Uruguay. En sus inicios, dos años atrás, el material estrella fue el acrílico, empleado en distintos tipos de mesas, excepcional por su resistencia y durabilidad. Otra de sus ventajas radica en la flexibilidad para realizar piezas a medida, permitiéndole al cliente customizar los diseños originales en función de sus espacios y necesidades. De cara a este nuevo año, la marca apuesta por complementar sus piezas de mobiliario, con objetos de decoración que logran encapsular la experiencia funlō volviéndola accesible, a un rango mayor de sus ya declarados admiradores.