Proyectada para ser construida en un terreno de mil doscientos metros cuadrados, esta casa se relaciona naturalmente con el nombre que los habitantes establecieron desde un principio, Is this love.
Fue concebida a medida de los sueños e inquietudes culturales de una familia de nacionalidad argentina-estadounidense que ha recorrido distintos lugares en el mundo. “Es una pareja encantadora que eligió este lugar en el mundo para construir su refugio, un lugar donde pasar del ocio a las grabaciones musicales. La casa incluye una sala especial equipada con todo lo necesario e inherente a una sala de grabaciones profesional”, afirma el arquitecto Martín Gómez.
La casa se desarrolla en dos volúmenes que se articulan a partir de un gran patio/jardín con pileta y amplios decks. El volumen secundario, ubicado sobre la calle, tiene una cochera con capacidad para dos automóviles y motos. También alberga una sala especial equipada para funcionar como un estudio profesional de grabación, kichenette y baño. En la planta alta se encuentra la terraza con la zona de parrilla, asados y reuniones, con baño de pileta, vestuario y sauna. Una parte de este bloque se destinó a servicios de lavado y planchado con su respectivo tendedero para ropa.
El volumen principal se integra con tres plantas y fue concebido a partir de un diseño simple y fácil de leer, con muy pocas circulaciones horizontales. Una escalera central coronada por una inmensa claraboya organiza la casa, este hall se encuentra revestido con madera de caoba impecablemente pulida. Los chicos de la familia tienen sus propios espacios, ya que este volumen se desarrolla en dos plantas. En planta baja se encuentran cuatro cómodos dormitorios en suite. La planta alta, totalmente libre y abierta hacia los cuatro puntos cardinales, vuela entre las ramas de los pinos marítimos que habitan el lugar con el fondo del océano Atlántico, aloja una sala de juegos, un escritorio para pensar música y un gran living comedor con cocina incorporada. Este espacio adquiere una atmósfera increíble que aprovecha singularmente las distintas luces del día y las diferentes vistas, que cambian a medida que se recorre la casa.
Este volumen principal se encuentra en medio de un impresionante bosque de pinos marítimos, idénticos a los existentes en la costa sur de Francia, sobre el Mediterráneo. El hecho de que la casa sea tan libre nos da la sensación de vivir en pleno contacto con estos árboles, que hacen las veces de postigos dando privacidad a los espacios interiores. Este fue el partido de esta casa, lograr una interacción total entre los dos medios, el natural y el creado por el hombre. La ambientación de la casa se hizo en base a un concepto de actualidad mezclado con elementos de diseño nórdico, muchas de estas piezas fueron compradas en BoConcept. “Queríamos lograr una casa moderna y actual, pero a la vez cálida y confortable, tanto en invierno como en verano”, afirma Martín Gómez.
La casa se encuentra emplazada en un terreno de 1200 metros cuadrados, con una clara sensación de dominio sobre el añoso bosque de pinos. Sus 450 metros cuadrados cubiertos hacen que su vida sea cómoda para una familia que busca el confort y el placer en cada visita.
“Esta casa fue un gran placer para nosotros, desde el proyecto hasta la concreción total de la obra”, nos afirma Martín Gómez Pulitnick.
Fotografía Daniela Mac Adden