Cecilia Duque es diseñadora de espacios interiores. Fundadora y directora del ESTUDIO PUENTE que funciona en Mercedes, Soriano. Su gestión se destaca especialmente, ya que acostumbramos difundir la obra de profesionales radicados en la capital o en Punta del Este. Luego de consolidar con desarrollo y singular éxito su colección de muebles, la calidad de los proyectos de interiorismo que concreta nos anima a seguir de cerca su carrera, tarea con la cual con la presente edición cumplimos, por tercera vez en los últimos dos años. En esta oportunidad llegamos hasta la Trump Tower en la Brava de Punta del Este donde acaba de entregar un semi piso completo que al tiempo que superó las expectativas de su cliente, la afianza en el camino del buen diseño.
Desde su Estudio instalado en el centro de la ciudad de Mercedes, la diseñadora de interiores Cecilia Duque se mantiene en la huella del buen diseño desarrollando proyectos a medida. La circunstancia de su ubicación geográfica, alejada de la capital y de Punta del Este, centros neurálgicos para la actividad, el desempeño profesional de Cecilia prospera en base a la calidad de sus proyectos. En esta oportunidad llamó nuestra atención el proyecto ejecutado en una de las plantas del TRUMP TOWER en la Brava de Punta del Este, se trata de un semi piso a partir del cual Estudio PUENTE afianza su desempeño en la zona este del país.
…se trata de nuestro segundo proyecto en Punta del Este y por las características del cliente, tanto como del apartamento que debíamos resolver, se trató de un gran desafío para el cual dedicamos muchas horas y con gran entusiasmo. Se trata de una unidad nueva, que nuestro cliente estrenaría y con la ilusión del caso nos trasmitió ideas muy claras a propósito de lo que deseaba, pero sin el detalle fino que permite asumir un proyecto resuelto, esto es, luego de sucesivas entrevistas de trabajo afinamos la idea rectora, una segunda casa, veraniega, cómoda y descontraída pero a la vez fina y elegante. A partir de esa idea básica y del menú de necesidades funcionales que establecimos, comenzamos a trabajar en el proyecto de resolver el equipamiento, circulación y estética de trescientos metros cuadrados.
El apartamento que nos entregó para trabajar era muy espacioso, contaba con vistas maravillosas hacia la playa, mucha luz natural y dimensiones singularmente generosas en todos sus ambientes. El guion que armamos para diseñar nuestro proyecto se basó en las inquietudes culturales de nuestro habitante y de la calidad espacial sobre la cual trabajamos. De acuerdo a las necesidades detectadas en las sucesivas entrevistas previas, el living despuntaba como el centro del proyecto, se trataba de concebir un espacio relajado y elegante, donde además de disfrutar a diario de las maravillosas vistas nuestro habitante recibiera a sus familiares y amigos, habida cuenta de que disfruta mucho el recibirlos. Concebimos entonces un espacio de grandes dimensiones que equipamos con una rinconera tapizada en lino, un sillón circular que diseñamos y encargamos a medida en una tapicería de Montevideo. Las mesas también las diseñamos y encargamos, al igual que el gran mueble que contiene el centro de audio y video, que tiene seis metros de largo de madera laqueada con dos piezas de itop, Laica Gold y otra itop negra silk a partir de las cuales generamos un vínculo visual con el comedor, ambiente que le sucede a este.
La mesa de comedor es importante, tiene dos metros cuarenta de largo por un metro diez de ancho, contiene cómodamente a ocho comensales. Se diseñó en el Estudio y se encargó a un taller de Montevideo. Su base es de hierro, finamente plegado y secado al horno y la tapa es de granito Alpinus igual que el aparador que acompaña a la mesa, generando un telón posterior. Las sillas también se diseñaron a medida.
Son 8 sillas tapizadas tanto en asiento y respaldo (medio punto) con tela aquaclean en tono crudo con patas en tono negro que mantienen la comunicación en ambos espacios integrados, pero finamente delimitados.
Cada rincón se destaca por sí solo y en conjunto establecen el todo que se percibe al ingresar y luego de permanecer en cualquiera de los espacios. Entonces aparece la lámpara FLOS que cuelga sobre la mesa del comedor, o el cuadro que encargamos especialmente para acompañar la gran rinconera del living, con dos hojas de algodón teñidas para lograr una composición especial. O la alfombra que diseñamos a medida y tiene casi cinco metros de largo, tejida en yute y lana.
Con el dormitorio principal debimos sortear algunas dificultades que nos presentaba la planta original ya que al ocupar una esquina del edificio marcaba la curva pronunciada que define la fisonomía de la torre. La idea inicial parte de revestir el tabique de pared y vestidor en su totalidad en laca. Sobre la pared del dormitorio se colocó un respaldo de 4.80 de largo diseñado y fabricado por el mismo tapicero que hizo las sillas del comedor y el sillón circular. De dicho respaldo nacen los apliques de luz y las cajas de enchufes y comandos de luz. La tela del respaldo es una tela de luxe importada especialmente en tono beige neutro que hace match con el tono de laca del respaldo. Un gran espejo caja nos recibe cuando salimos del vestidor y entramos en el dormitorio. De medidas generosas (1.80 x 1.10) permite la observación de cuerpo entero y aporta luminosidad a esa zona. La cama es importante y cuenta con dos metros por dos metros y la vestimos con muchas capas en tonos crudos, blancos y beige. La alfombra la diseñamos en lana 100% y la fabricamos en Montevideo como todas las demás. El sector de descanso y/o lectura se dispone en la esquina del dormitorio que emerge como una proa, con un sofá de 1.30 de ancho en lino tono visón y un carro bar para disfrutar del desayuno viendo el amanecer. Los detalles decorativos dan el cierre al aire del dormitorio, son imágenes de faros y mares encuadrados a medida, se le suman los detalles de libros, velas y lupas que aportan al sector de lectura del dormitorio un lugar de encuentro y relax. Con los dormitorios para huéspedes, que son dos, generamos un juego de equilibrios y formas que mantiene el guion general de nuestro proyecto. En el primero instalamos un somier de una plaza y generamos un revestimiento de pared a pared en madera laqueada en un tono alto de beige que el empleado en el dormitorio principal. Diseñamos una alfombra en tonos de crudo, marrón y negro y diseñamos un escritorio en madera que es escoltado por un espejo con marco de ratán y una butaca que opera como despojador. Los cuadros de este dormitorio están enmarcados por cajas de color negro y son 4 telas pintadas a mano de figuras irregulares que dan su impronta al dormitorio. En el segundo dormitorio para huéspedes, instalamos un somier queen de dos plazas. Repetimos el revestimiento del anterior dormitorio y también repetimos el mismo tono de tela para el respaldo, que va también de pared a pared. Las mesas de luz de tienda establecen el marco natural para la cama y la alfombra diseñada en tonos crudos, negros y azules genera el ritmo del espacio.
Los cuadros en esta oportunidad van con los tonos elegidos para la ropa de cama en tono beige, gris y azul y son telas estampadas con imágenes de calamares, langostinos y todo lo referido al mar en un tono azulado, que aportan la impronta pensada en dicho dormitorio. La butaca al igual que el dormitorio anterior es un singular despojador. El baño social es pequeño y presentaba las dificultades propias de su tamaño. Nuestro habitante no estaba convencido de utilizar papel tapiz para revestir sus paredes, fue necesario explicarle el efecto de esa acción, que finalmente implementamos. Resolvimos diseñar una pieza que imprimimos en Montevideo con un diseño tropical, abundante vegetación y dos pájaros especialmente elegidos. Las lámparas suspendidas son modelo de tienda y resultan ideales para la propuesta del baño ya que son rusticas (mármol). El espejo de manera irregular descansa sobre la bacha, generando una sensación muy agradable. La cocina tiene una diagramación lineal con un remate visual al fondo con la vista. Concebimos un diseño simple y funcional, basado en una mesa de tienda y cuatro sillas de diseño clásico. El toque de color es el cuadro de “perro lector” que está colocado en una de las paredes laterales. El cuadro es de medidas generosas 1 x 1 que se dibujó de manera digital y se imprimió la tela con bastidor negro. La alfombra caminero de yute combinado en 2 tonos también la diseñamos y fabricamos a medida, aporta calidez y marca el ritmo visual hacia el remate del comedor diario.
