Arquitecta Cecilia Borri
UBICACIÓN: ARENAS DE JOSÉ IGNACIO, PUNTA DEL ESTE, URUGUAY PROGRAMA: SEGUNDA CASA
ÁREA CONSTRUIDA: 390 M2
AÑO: 2017
FOTOGRAFÍA: SANTIAGO CHAER
FOTOGRAFÍA AÉREA: ESTUDIO BORRI
Uno de los principales desafíos de diseñar una casa en Punta del Este es que las mejores vistas generalmente no coinciden con las mejores orientaciones, Norte y Sur tironean las ideas de partido. La vivienda tiene que ofrecer reparo al viento fresco de la playa y a la vez permitir contemplar las vistas cambiantes de la costa. Y como no solo se vive en verano, mientras se abren ventanas hacia el mar, el sol del norte debe filtrarse en los ambientes durante las restantes estaciones. En Arenas de José Ignacio este terreno en esquina con vistas increíbles presentaba múltiples opciones y el desafío de la privacidad, pudiendo quedar demasiado expuesta. Desde las primeras líneas dominó la idea de la casa como una “ventana”, desde la que se pudiera mirar, abrir y cerrar los ambientes a los balcones y terrazas exteriores que enfrentan todas las vistas posibles. Materializando estas ideas y premisas se ubicaron los ambientes principales en planta alta mirando hacia el sudeste. En los primeros bosquejos la tipología de casa en L se transforma en una C que acompaña la geometría del terreno. Esta disposición permite ver la línea azul verdosa del mar desde el comedor, la cocina, la barbacoa y el dormitorio principal. Y al abrir una ventana escuchar las olas y respirar el olor a yodo y sal. Estos mismos ambientes van conformando un patio más privado hacia el oeste. A la protección del viento se ubica la piscina y el deck que miran al Faro de José Ignacio, conectados con la barbacoa hacia el norte. En los cortes esquemáticos se estudia la vinculación de los niveles y los ambientes. Se opta por unificar el acceso y la distribución en la caja de escalera utilizando medios niveles. Este bloque se identifica desde el exterior por su techo , una losa de hormigón que corta la línea superior de la construcción en todo el ancho del volumen, conectando el exterior con el patio interior. De esta forma, al ir subiendo la escalera hacia el living se descubren la piscina y el deck superior con las dunas y el mar de fondo. La planta baja se reservó para las habitaciones de visitas y los servicios. Para cerrar el garaje se utilizaron columnas premoldeadas de hormigón que aportan textura a dos intenciones de diseño: la ventana-mirador es la parte inferior de la fachada y permiten que la luz pase al ambiente de forma tamizada. El hormigón armado fue el material elegido para destacar estas dos intenciones de diseño: la ventana mirador es un gran recuadro de hormigón visto que enmarca los ambientes principales en planta alta, y la caja de escalera es una gran losa de hormigón que corta la volumetría dando lugar a la puerta de acceso doble de madera que va de piso a techo. El microcemento alisado y la piedra gris revisten los pisos de casi toda la casa. La piedra con tonos arena aportan calidez y textura a los muros. La madera de lapacho se reserva para las expansiones exteriores. Barbacoa es el único ambiente que corta la uniformidad de los grises incorporando los tonos más cálidos de la madera. Al tratarse de una segunda casa, los materiales debían ser de fácil mantenimiento. En todas las decisiones que conformaron esta vivienda estuvo presente.