ESPACIO: LA ORIGINALIDAD DE LA VIGENCIA, WORKSHOP HOTEL SAN RAFAEL
COLABORADORES: RMA AUDIO Y VIDEO / STYLE CONSTRUCCINES / TROCCOLI / TRIOS LIGHTING / A&L ELECTRICIDAD / SINTEPLAST
FOTOS NICO DI TRÁPANI
Hassen Balut atraviesa estos días una de esas raras encrucijadas en que un creador sabe —o presiente, con la mezcla de vértigo y encanto que acompaña a las grandes empresas— que tiene entre manos un proyecto que lo desbordará y lo definirá. No todos los diseñadores pueden decir que han sido convocados para imaginar, de principio a fin, los ambientes de un gigante renacido: el mítico Hotel Cipriani San Rafael. Esa mole sentimental, cargada de historias de esplendor y silencios, hoy recompuesta por el Estudio Viñoly, ha sorprendido incluso a los más escépticos, que se creían blindados contra cualquier gesto de nostalgia transfigurada en arquitectura.
Balut, sin embargo, no se limita a embellecer superficies: propone un relato. En cada mueble, en cada pieza de autor especialmente escogida, hay una pequeña declaración de principios. Sus diseños —propios, reconocibles, casi confidenciales— insuflan al conjunto una atmósfera que es mitad evocación de los años dorados, mitad afirmación de nuestro tiempo, como si los pasillos y salones del Cipriani pudieran dialogar con el pasado sin renunciar al pulso vibrante del presente.
Quizás por eso su participación en La Casa de AYD adquirió un cariz tan íntimo. Allí no exhibió estridencias ni excesos; eligió, más bien, compartir un fragmento de su Estudio, ese rincón donde conviven la memoria de lo que fue y el anuncio de lo que vendrá. Un espacio que parece murmurar que el diseño, cuando es verdadero, siempre vive en transición: guarda el archivo del ayer, pero apunta, inevitable, hacia el mañana que ya asoma, casi impaciente, detrás de la puerta.









